Son criticadas por especialistas y, sobre todo, muchas mujeres. Sin embargo, los expertos aseguran que se trata de falsas creencias.
- Causan infertilidad: ningún estudio lo ha demostrado. Se confunde porque los anticonceptivos pueden ocultar otros problemas: en muchos casos ayudan a regularizar el ciclo menstrual y eso da la impresión de que no existe ninguna patología.
- Cualquier pastilla sirve para cualquier mujer: esto es totalmente falso. Cada mujer es distinta, con un comportamiento físico único. Deben contemplarse todas las variables posibles, ciclos menstruales, índices hormonales, etc.
- Los anticonceptivos contribuyen al aumento de peso: todos los distribuidos comercialmente no generan ansiedad ni conducen al sobrepeso. Años atrás existían unas píldoras que generaban retención de líquidos, pero nada más.
- No pueden tomarse si se fuma: el tabaco debe abandonarse por sus consecuencias negativas propias, no tiene relación alguna con la administración de anticonceptivos.
- Deben realizarse pausas luego de un tiempo determinado: este mito también tiene que ver con las pastillas que se elaboraban mucho tiempo atrás y la alta dosis en las que se recetaban. Hoy eso ya no es necesario.
- Producen várices y otros problemas circulatorios: aquellos que tienen una base en estrógenos no generan várices pero sí estimulan a las mujeres que tengan una predisposición o venas visibles con anterioridad.
- Ayudan a regularizar el ciclo de la mujer: Esta sentencia es cierta. Además, en aquellas pacientes que sufren endometriosis, sirven para reducir los dolores al disminuir la cantidad de ciclos.