La bronquiolitis afecta a unos 300.000 niños argentinos de menos de un año. En nuestra nota de blog encontrarás información sobre cómo prevenirla.
La bronquiolitis es la primera causa de muerte en niños de entre un mes y un año en nuestro país y también en todo el mundo. Es una enfermedad que afecta vías respiratorias aéreas inferiores (bronquiolos) –que se inflaman-. Los primeros síntomas son similares a una gripe o una crisis de asma.
La llegada del frío trae consigo los virus de invierno, entre ellos los responsables de la más extendida infección infantil. Y se convierte en una causa frecuente de hospitalización de niños menores de un año durante esta época y comienzos de la primavera: entre 12.000 y 18.000 niños requieren hospitalización en todo el país (más de tres millones en todo el mundo).
El origen más frecuente de la bronquiolitis es el virus sincicial respiratorio (VSR). Más de la mitad de los bebés están expuestos a este virus en su primer año de vida. Otros virus que pueden causar la bronquiolitis pueden ser: Adenovirus, Influenza y Parainfluenza.
Lamentablemente, las cifras nos demuestran una situación difícil en nuestro país: 5 de cada 10.000 niños mueren en el hospital, y la misma cantidad en el hogar, por problemas sociales o de acceso a la salud, o incluso de reconocimiento de lo que sucede, porque los padres no detectan signos de alarma.
Por ello, es indispensable conocer cómo se contagia, sus síntomas, cómo podemos prevenirla y acudir al médico lo antes posible.
Conocé cómo se contagia
El virus se transmite de una persona a otra, por el contacto directo con las manos contaminadas de secreciones nasales, o a través de gotitas aerotransportadas generadas al toser o estornudar, por aquellos que presentan la enfermedad. Insistimos en el ademán de taparse la boca con el ante codo, al toser o al estornudar, y no con las manos. Asimismo, la higienización periódica de las manos a través de su lavado con agua y jabón.
Te informamos sobre los síntomas
La bronquiolitis suele comenzar como un resfrío. Luego de dos o tres días de ese cuadro, algunos niños pueden tener pocos síntomas o síntomas menores y otros desarrollar más problemas respiratorios, como sibilancias (ruido similar a un silbido en el pecho, al respirar) y tos.
Entre los síntomas pueden aparecer:
- Tos.
- Fiebre.
- Fatiga.
- Respiración muy rápida (taquipnea).
- Aleteo nasal o retracción de los músculos del tórax en un esfuerzo por respirar.
- Cansancio.
- Color azulado en la piel, las uñas o los labios debido a la falta de oxígeno (cianosis): en este caso necesita tratamiento urgente.
¿Cuáles son las medidas de prevención?
- Mantené la lactancia materna, si estás amamantando.
- No expongas a los niños al humo del cigarrillo.
- Lavales las manos a los niños con agua y jabón con frecuencia.
- Mantené alejado a los bebés de aquellas personas que están resfriadas o tienen tos.
- Si alguien en la familia tiene alguna infección de las vías respiratorias, debe lavarse las manos con frecuencia, especialmente antes de manipular al niño, o al ingresar al hogar cuando llega de la calle.
¿Cómo se trata a la bronquiolitis?
Como cualquier infección viral, los antibióticos no son efectivos. El tratamiento incluye broncodilatadores administrados con un aerosol y una aerocámara (generalmente denominados como «paf»). También puede incluir nebulizaciones y en los bebés más pequeños sesiones de kinesiología para terminar de expectorar la mucosidad.
Ante la menor sospecha, es importante que realices la consulta con el pediatra.
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