Se conoce como ocio al tiempo libre que se dedica a actividades que no son trabajo ni tareas del hogar y que pueden ser consideradas como recreativas. El ocio es distinto al tiempo dedicado a actividades obligatorias o esenciales, como comer, dormir, hacer tareas vinculadas a cierta necesidad, etc. Las actividades de ocio se hacen en el tiempo libre y no por obligación.

Sin embargo, cuando hablamos de ocio, es importante ir más allá de la concepción de tiempo libre y destacar la calidad de la experiencia que éste aporta. Las actividades de ocio pueden realizarse como fuente de disfrute y satisfacción con un fin en sí mismo, al mismo tiempo que pueden realizarse para conseguir otros logros y objetivos.

Ambas formas de ocio favorecen el equilibrio y desarrollo personal cuando es enfocado positivamente. Sin embargo, no todo tipo de ocio reporta beneficio en sí, por el contrario, jóvenes y adolescentes podrían estar utilizando de forma inadecuada su tiempo de ocio.

Un ocio positivo y valioso, es aquel que tiene la capacidad de facilitar el desarrollo individual y colectivo, reportando beneficios a nivel físico, emocional, cognitivo y social. El desarrollo de estos aspectos, son imprescindibles para el ajuste psicológico y la formación de la identidad en la etapa juvenil.

Por ello, se hace necesaria la participación e involucramiento de las figuras adultas de referencia, para guiar y acompañar a menores y jóvenes, supervisando el cultivo de un ocio positivo, enriquecedor y saludable, lo que repercutirá en la evolución y desarrollo de etapas posteriores.

Ahora, ¿de qué hablamos cuando hablamos de ocio negativo?

Un claro ejemplo lo representa el ocio digital, una práctica cada vez más extendida en la población joven, sin embargo, los beneficios que reporta, según los expertos o expertas, no son tan altos. Hay casos en el que el ocio digital, podrían fomentar el sedentarismo, aislamiento y descuidar otras áreas de su vida o sustituir otras formas de ocio que pueden aportar altos beneficios.

Incluso, la sobreexposición del cerebro a los aparatos electrónicos durante el crecimiento podría derivar en el futuro en depresión, siendo durante la adolescencia el momento de mayor vulnerabilidad y probabilidad de desarrollar este trastorno por nuestro/as hijo/as.

Sin embargo, existen opciones dentro de las nuevas tecnologías que promueven la participación en familia y el movimiento físico. Se trata de proteger el desarrollo integral y bienestar de los más jóvenes y encontrar un equilibrio.

En este sentido es importante la planificación de las actividades de ocio; el improvisado y casual demanda pocas habilidades y conocimientos, como por ejemplo escuchar música o jugar juegos de mesa. Al contrario, un ocio planificado y organizado requiere esfuerzo, constancia y sentido de pertenencia de grupo (por ejemplo, cuando se realiza la práctica de un deporte, voluntariado o un hobby).

En resumen, es importante tener presente estos aspectos:

  • El tiempo de ocio es muy importante en el equilibrio y bienestar personal, así como en el desarrollo de menores, adolescentes y jóvenes.
  • Según el uso que se dé al tiempo de ocio, puede o no significar beneficios.
  • El ocio planificado reporta más beneficios que aquel improvisado y casual.
  • La participación y acompañamiento de adultos es indispensable para que hagan un correcto uso de su tiempo de ocio.
  • Supervisemos y cuidemos qué, cuánto y cómo es el ocio digital de nuestro/as hijo/as.
16 de enero de 2020
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