Llegan las
vacaciones y queremos viajar, ya sea para volver a nuestros lugares preferidos
y habituales o conocer lugares nuevos, hacer paseos y excursiones, o
simplemente desconectarnos de todo y descansar, lo principal es relajarnos y
disfrutar.
Cuando padecés diabetes, sabés que tu vida debe ser ordenada y tenés que llevar
a cabo ciertos controles, pero eso no impide que puedas disfrutar, relajarte,
conocer gente y lugares hermosos.
En
vacaciones solemos salir de la rutina, por ejemplo, probamos delicias
regionales, o comemos en restaurantes y hoteles. Eso puede producir un
desbalance en la dieta habitual y puede traer algunas complicaciones,
especialmente si tenés diabetes. Por eso, en esta nota, te daremos algunos
consejos sobre cómo cuidarte y disfrutar sin complicaciones.
Para mantener un buen control de esta enfermedad hay que tener en cuenta
tres pilares fundamentales:
1- Mantener un plan de alimentación, con horarios y colaciones establecidas y disminuir el consumo de grasas, azúcares, sal y carbohidratos.
2- Practicar algún ejercicio o caminata al menos 30 minutos al día.
3-Controlarse con el especialista, realizar los estudios que le prescriban y cumplir con la medicación farmacológica.
Organizar el viaje y mantener una rutina de cuidados
Los especialistas recomiendan planificar con tiempo los viajes. Conviene visitar al médico al menos 3 semanas antes de viajar para poder planificar la alimentación y los cuidados de acuerdo al itinerario y actividades del viaje.
Los especialistas recomiendan planificar con tiempo los viajes. Conviene visitar al médico al menos 3 semanas antes de viajar para poder planificar la alimentación y los cuidados de acuerdo al itinerario y actividades del viaje.
¿Qué debés llevar en la valija?
-Una pulsera o tarjeta con información relevante, por ejemplo: enfermedades, tipo de sangre, alergias, cobertura médica con número de emergencia y contacto familiar.
-Ropa liviana y cómoda en verano y de abrigo en invierno, sombrero y zapatillas cómodas.
¿Qué llevar en el equipaje de mano?
-Los medicamentos. Revisar la fecha de vencimiento y la cantidad suficiente para cubrir los días de viaje. Embalarlos con una etiqueta que indique para qué sirven, los horarios y las dosis habituales.
-Si es posible, una receta extra de los remedios por si se te extravían, y además te puede servir para justificar la medicación que llevas tanto en el aeropuerto como en la aduana.
-Un pequeño botiquín con insumos básicos como curitas, agua oxigenada, pomadas para quemaduras, remedios para malestares estomacales, antifebriles y para evitar vómitos y mareos en caso de viajar en barco.
-El medidor de glucosa con suficientes tiras reactivas, pilas para recambio lancetas y pilas.
Elegí comer sano
-Llevá frutas deshidratadas, frutos secos y semillas para las colaciones. Recordá que lo mejor es consumirlos en porciones pequeñas.
-La hidratación es fundamental, especialmente con agua natural. Si es posible evitá tomar bebidas gaseosas, jugos artificiales o alcohol.
-Si vas a lugares que brindan desayuno estilo continental, tratá de elegir más cantidad de frutas, licuados, panes integrales y verduras.
-Si querés probar alguna comida típica del lugar, comé una pequeña porción o comprá el menú para compartir con otra persona.
-En cuanto a las meriendas y postres son típicos los churros, facturas, helados, etc. Te recomendamos que elijas un día permitido y el resto de los días consumas frutas, cereales, yogures descremados o gelatinas.
Otros tips útiles:
-Evitá estar descalzo. Tené cuidado al caminar en el piso caliente alrededor de las piletas o en la arena de las playas. Lo mismo si se hacés excursiones de senderismo o para escalar.
-Usá protector solar de amplio factor para flitrar los rayos UV.
-Si llegás a tener los niveles muy bajos de glucosa, que es hipoglucemia, evitá practicar actividad física de alto impacto hasta que los niveles se normalicen.
-Si vas a viajar a países donde se exigen ciertas vacunas, averiguá con tiempo donde aplicártelas y así evitarás demoras.
Finalmente, un consejo que sirve tanto para las vacaciones como para la rutina diaria: controlá el estrés y tené una actitud positiva frente a los retos que presenta la diabetes en el día a día.
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