02Feb 2017
EPOC: Cuando los pulmones se enferman lentamente

Los pulmones son órganos que tienen una gran reserva funcional. Fumar y estar expuesto a otros tóxicos los deteriora gradualmente, hasta afectarlos seriamente, pudiendo provocar una enfermedad crónica obstructiva llamada EPOC.

Los factores genéticos y hereditarios también influyen, ya que todos los individuos que se exponen a los mismos tóxicos desarrollan la enfermedad.

Nuestros pulmones tienen una gran reserva de espacio pero esta no es infinita.  Al compararlo monetariamente, podemos decir que somos ricos y vamos gastando, cigarrillo a cigarrillo, un poco de nuestra fortuna. Luego de 10, 20, y a veces 30 años, llega un momento en el que «la plata no alcanza más». Así podemos comprender la compleja transición de la salud a la enfermedad.

El proceso se tilda de «silencioso», porque es recién luego de años de una repetida acumulación, inflamación y cambios de tejidos pueden producirse alteraciones pulmonares. Sin embargo, si experimentás falta de aire, tos y producción de moco por un tiempo prolongado, es necesario que visites a tu médico de cabecera.

La EPOC suele manifestarse después de los 50 años y se caracteriza por síntomas como tos, bronquitis crónica y falta de aire (disnea) con episodios de empeoramiento según cada paciente.

¿Puede curarse?

La enfermedad es de por vida ya que el daño es progresivo. De todas maneras, es posible frenar el deterioro de los pulmones.

Lo primero que debe hacerse para favorecer el estado de una persona con EPOC es dejar de fumar. Luego, tomar la medicación recetada, caminar aumentando de a poco las distancias, mantener un peso adecuado,  y efectuar la rehabilitación pulmonar indicada.

02 de febrero de 2017
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