Cualquier herida puede llegar a infectarse, por ello es necesario aplicarle los cuidados adecuados, entre los que se incluyen una buena limpieza y la aplicación de pomadas antibióticas durante los primeros días. Te compartimos todos los pasos para curarla en esta nota.
Cualquier herida abierta es susceptible a infecciones, y si no se controla, puede propagarse a la piel que se encuentra alrededor, causando diversas complicaciones. Por eso, si te has hecho una herida, ya sea por corte, desgarro, contusión o quemadura, es muy importante que sigas los siguientes pasos:
- Observar la herida con detenimiento para evaluar su nivel de gravedad.
- Lavar la herida con agua templada y jabón, así eliminarás la suciedad. Si el agua no es capaz de eliminar todos los desechos dentro de la herida, será necesario utilizar unas pinzas.
- Evitar cualquier infección utilizando crema antibiótica de aplicación tópica durante al menos un día.
- Cubrir la herida con un vendaje para mantenerla limpia y sin riesgo de infección.
- Observar la herida mientras evoluciona para asegurarte de que no se infecte.
Para determinar que no se ha infectado, comprobá lo siguiente:
-Que sea indolora al tacto.
-Que no tenga signos de inflamación.
-Que tenga una temperatura normal, ni alta ni baja.
-Que tenga color sonrosado y se aclare con el tiempo.
¿Cómo saber si la herida está infectada? En ese caso, tendrá:
-Secreción de pus.
-Mal olor y aspecto.
-Ausencia de señales de cicatrización.
-Fiebre local o general, acompañada por enrojecimiento, inflamación en los
bordes y sensibilidad.
-Dolor persistente, incluso con suaves movimientos. En casos extremos se pueden
detectar sensaciones punzantes.
¿Cómo curar una herida infectada?
Comenzá a tratarla de inmediato siguiendo los siguientes pasos:
1. Desinfectar la herida:
Lavá la herida con suero fisiológico y jabón neutro para desinfectar la herida y regular el pH de la zona. Secá con una gasa estéril, así evitarás cualquier bacteria que exista en la toalla o servilleta. Eliminá toda la secreción o suciedad en la herida y dejála completamente limpia.
2. Aplicar un medicamento antibiótico
Aplicá una pomada antibiótica sobre la zona afectada, entre 2 y 3 veces por día, lavando la herida cada vez que vayas a aplicar la pomada. Este proceso debe durar al menos 5 días para eliminar por completo la infección y acelerar el proceso de curación.
3. Resguardar la herida
Hacé un vendaje con gasas estériles, evitando así la contaminación o nueva infección en la zona.
4. Mantener la herida supervisada
Vigilá su evolución. En caso de no observar ninguna mejora, acudí a tu centro médico de confianza.
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