Seguir una dieta equilibrada, practicar 30 minutos de actividad física al día y mantener bajo control los focos de estrés puede ayudarnos a cuidar la salud cardiovascular. Leé esta nota y conocé otras claves para lograrlo.
El sistema cardiovascular es uno de los más importantes del cuerpo, y por ello, cuidar la salud cardiovascular debe ser una prioridad.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que las enfermedades cardiovasculares son la causa principal de muerte en el mundo, incluso por encima de los diferentes tipos de cáncer. Se trata de un grupo de desórdenes cardíacos y circulatorios que pueden afectar gravemente la calidad de vida.
Estos trastornos pueden desarrollarse por aspectos no modificables, como la edad, el sexo, la genética o la diabetes. No obstante, otros factores negativos se pueden frenar mediante la adopción de hábitos saludables.
1. Ejercicio físico
Ejerce beneficios directos sobre el sistema cardiorrespiratorio y disminuye el riesgo de sufrir trastornos como el sobrepeso, la hipertensión y el colesterol alto.
Su práctica regular minimiza las probabilidades de padecer angina de pecho, infarto de miocardio y accidentes cerebrovasculares.
Sus bondades no distinguen sexo ni edad, siempre y cuando se practique de forma continua, durante un mínimo de 30 minutos al día.
2. Alimentación sana y equilibrada
Seguir unos hábitos alimenticios saludables es clave para controlar tres de los principales factores de riesgo: el colesterol alto, la presión arterial descontrolada y el exceso de peso.
Una dieta controlada en calorías y grasas, con un alto contenido de frutas y vegetales, disminuye la probabilidad de desarrollar una patología cardiovascular. También es necesario limitar el consumo de alimentos con altos niveles de sodio y colesterol, dos sustancias que impactan de forma negativa en la circulación, las arterias y el corazón.
3. Limitar el consumo de alcohol
Hay estudios que afirman que el consumo moderado de alcohol —una o dos copas de vino tinto al día— podría disminuir el riesgo de problemas cardiovasculares.
No obstante, su ingesta excesiva puede tener un efecto contrario, ya que su alto contenido de toxinas y las dificultades que ocasiona en el metabolismo se vinculan con sus efectos negativos sobre la salud del corazón.
4. Incrementar el consumo de omega 3
Consumir ácidos grasos omega 3 es una de las formas más recomendadas por la medicina actual para cuidar la salud cardiovascular. Se trata de un grupo de grasas saludables que, en lugar de afectar las arterias e incrementar el colesterol malo (LDL), facilita su limpieza y promueve el aumento del colesterol bueno (HDL).
Su ingesta moderada, ya sea de fuentes naturales o suplementos, está relacionada con la disminución del riesgo de varias patologías cardíacas y cognitivas. Se puede obtener de alimentos como:
- Pescados (sardinas, salmón, caballa, atún, arenque).
- Semillas.
- Frutos secos.
- Aceite de oliva.
5. Mantener un peso saludable
Tanto el sobrepeso como la obesidad provocan desequilibrios y afectan de manera negativa a la salud del corazón, el sistema circulatorio y el cerebro. Padecerlos supone un riesgo alto de trastornos como:
- Hipertensión.
- Cardiopatía coronaria.
- Accidentes cerebrovasculares.
- Diabetes tipo 2.
- Infartos.
- Colesterol alto.
- Trombosis.
Un número elevado de casos de cardiopatía coronaria tiene vínculos con un índice de masa corporal —IMC— superior a 25. Por otro lado, la acumulación de grasa abdominal influye en los problemas cardíacos incluso más que el IMC.
6. Practicar técnicas de relajación
La ansiedad y el estrés pueden afectar la salud del corazón. Hay más probabilidades de sufrir un ataque cardíaco ante una situación de estrés, especialmente durante el año posterior a un evento traumático.
Si bien el estrés como tal no desencadena enfermedades cardiovasculares, sí puede agravarlas o hacerlas más recurrentes mediante la elevación de la presión arterial. Por lo tanto, es primordial hacer actividades relajantes y placenteras, como los paseos, la meditación o el yoga.
Un plan integral
Poné en práctica los hábitos mencionado y hacéte chequeos médicos de rutina para verificar el estado de tu salud cardiovascular.
Mantenerse saludable depende de pequeños esfuerzos que se realizan cada día, ¡no te dejes estar!
Aún no hay comentarios en esta nota.
QUE TE AYUDARÁN A CUIDAR TU SALUD