Flores comestibles ¿Cómo incluirlas en las recetas?

05Sep 2024

Flores comestibles ¿Cómo incluirlas en las recetas?

De todas las variedades vegetales que tenemos solemos comer las hojas, los tallos, las raíces… ¿y por qué no también las flores? Muchas de ellas son comestibles y nos darán un extra de color, textura y sabor a las recetas. Te contamos cuáles son y cómo incluirlas en tus comidas.

No todas las flores son comestibles. Por ejemplo, las calas, rododendros, lobelias, jacintos y anturios son tóxicas. Es mejor ceñirse a las flores clásicas comestibles o buscar listados de flores que sí se pueden comer.

Te recomendamos 15 flores que se pueden comer y de qué manera:

1. Flores de lavanda

Las flores frescas y tiernas se usan en repostería. No son especialmente dulces, pero sus sabores encajan muy bien con los dulces. Agregalas a tus masas de galletitas, a batidos e incluso a tés e infusiones a las que quieras dar un toque floral.

2. Flores de cebollino

Florecen en primavera. Usalas para decorar y condimentar al momento de servir los platos, para que conserven su forma, color y frescura. En ensaladas es mejor dividirlas y no añadir el ramillete entero, así podremos disfrutarlas mucho mejor en cada bocado.

3. Flor de manzano

Tienen un sabor suave y floral (no saben a manzana). Son útiles para decorar platos, tanto salados como dulces. Con poner una o dos flores es suficiente. También podemos espolvorear con los pétalos.

4. Diente de león

Las flores frescas y nuevas tienen un sabor más bien dulce, con un aroma parecido a la miel. Las flores más maduras son más amargas. Se pueden comer también los capullos antes de que se abran, porque están más dulces. Para preservar la forma, color y aroma, mejor usar en crudo y añadir al final de las preparaciones. Los capullos se pueden saltear y quedan muy bien.

5. Caléndulas

Tienen sabores que van de amargo al picante (como la pimienta). Su principal atractivo es lo decorativas que quedan en ensaladas y platos frescos. Usalas al momento de servir para preservar su color y textura. Poné los pétalos de caléndula en cremas, purés, sopas, ensaladas.

6. Flores de salvia

Sus flores son tan comestibles como sus hojas, aunque tienen un sabor más neutro. Son muy bonitas, tanto las blancas como las azuladas o rosadas. Utilizalas antes de servir, tanto para decorar como para dar un toque de sabor.

7. Flores de naranjo (azahar)

Las flores de naranjo, que florece a finales de invierno y principios de primavera, se pueden usar como decoración, o usar el agua de azahar para aromatizar cualquier preparación dulce.

Receta de agua de azahar casera: lavá unos 250g de flores de naranjo, herví 1 litro de agua y cuando entre en ebullición fuerte apagá y añadí las flores. Tapá y déjalo reposar 24 horas en un lugar fresco. Colá con un colador fino o una muselina y guardá en la heladera.

8. Flores de cilantro

Florece en casa en primavera y verano. Aunque siempre usamos las hojas, las flores de cilantro son exquisitas. Lávalas bien y deshacelas. Podés usarlas en cualquier plato que terminarías con unas hojas frescas de cilantro, como en unos tacos, ensaladas, etc.

9. Hibisco

Es el cáliz que protege las flores. Son de color rojo fuerte, se venden deshidratadas y son muy populares como infusión, ya que tiene un sabor agradable, ligeramente dulce, un color rojo muy vivo, y nada de cafeína.

Para hacer una infusión herví agua y añadí un puñadito de flores de hibisco (4 o 5 flores para medio litro). Tapá y dejá reposar unos minutos.

Con las flores de hibisco también se preparan dulces. Se pueden añadir a bizcochos, tartas, galletas, barritas, salsas, helados, etc. Para ello hervilas hasta que estén bien blanditas o batí con la batidora para una textura más fina. Aportan, además, mucho color.

10. Flores de albahaca

Florecen cuando hace bastante calor. Cortá los tallos florales antes de que empiecen a sacar flores, para que siga sacando hojas, o dejá algún tallo para aprovechar las flores. Son muy chiquitas pero tienen gusto a albahaca fresca. Utilizalas en el momento de servir para que queden bonitas y no se degrade su sabor.

11. Rosas

Tanto los capullos como los pétalos de rosas se venden deshidratados para hacer infusiones, y quedan muy bien.

El agua de rosas es un condimento que se usa mucho en las cocinas de Oriente Medio para dulces y algunas cosas saladas. Lo bueno de comprar los capullos de rosas deshidratados es que te durarán mucho tiempo.

Para dar sabor, mejor hacer una infusión con ellos. Y para dar color, unos pétalos repartidos por el plato. Los pétalos quedan muy bien con ensaladas y patés vegetales.

12. Crisantemos

Son un poquito amargos, como la rúcula. Separá los pétalos y usalos en ensaladas (los pétalos son lo menos amargo).

13. Clavel o clavelina

No es que tengan un sabor espectacular, pero quedan muy bien con todo, en ensaladas y también con los dulces.

14. Flores de tomillo

Sus flores son pequeñitas y se usan igual que el tomillo fresco. Para que tus platos queden bien bonitos, además de aromáticos, poné las flores al final, antes de servir.

Podés hacer lo mismo con otras flores de plantas aromáticas como orégano, romero o mejorana.

15. Flor de guisante de mariposa o flor de guisante azul (Clitoria Ternatea)

Las flores de guisante azul se suelen vender en polvo para usar como el té verde matcha: como té, como colorante, como ingrediente en dulces, etc. Su principal atractivo es ese color azul que tiñe todo lo que queramos.

Ahora ya conocés las flores comestibles ¿Te animás a incluirlas en tu dieta?

05 de septiembre de 2024